En este sentido, Irma señaló que en cuanto vio a su ex marido con González, sintió “un poco de dolor por mi gente y el pueblo” y añadió: “Me agarró un celo divino. Nunca la vi en nuestro templo. La crucé en la temporada de divorcio -2019-, en las iglesias de Zona Sur”.

“Cuando ella iba a las iglesias, no miraba que se estaba restaurando desde abajo. Nunca la vi ayudar a las iglesias. Ayer me llovieron mensajes por WhatsApp diciendo que ahora está de novia con el presidente y se iba a querer colgar de Giménez”, sostuvo la pastora.

Además, la predicadora se quejó porque vio “muy espléndida” a la presentadora: “Yuyito no quería tocar a la gente, quería salir por atrás de la iglesia”. Asimismo, se refirió a Brenda Aloi, quien también transita el camino religioso: “Que Brenda se cuide del entorno, que no se case con la madre, ni con el padre”.

“Me contaban que Yuyito como pastora cobraba una barrabasada, una locura y pedía condiciones, que le pongamos una escalera atrás porque no quiere tocar a nadie, va a orar desde arriba para que la gente no la avasalle”, concluyó Irma.