
“Melania y yo iremos al funeral del papa Francisco, en Roma. ¡Esperamos estar allí!”, indicó Trump en su red social Truth Social.
Se trata de la primera vez que un mandatario norteamericano activo asista al sepelio de un Sumo Pontífice desde que George W. Bush (hijo) participó en el sepelio de Juan Pablo II en 2005.
El Vaticano aún no fijó la fecha de la ceremonia, pero se prevé que se llevará a cabo en los próximos días donde se respetará el estricto protocolo en este tipo de ocasiones.
“Descanse en paz, papa Francisco”, publicó en la red social X la Casa Blanca, que ilustró el mensaje con unas fotos del jefe de la Iglesia Católica junto a Trump.
Además, el republicano ordenó que las banderas de los edificios federales, embajadas y buques militares de Estados Unidos estén a media asta.
Vance, el primero en reaccionar y el último jerarca que vio al Papa con vida
El primero de los miembros del actual Gobierno estadounidense en reaccionar públicamente fue el vicepresidente JD Vance, quien se encuentra de visita en la India y que fue además una de las últimas personas en reunirse con el Papa.
“Me alegré de verlo ayer, aunque obviamente estaba muy enfermo. Pero siempre lo recordaré por la homilía que dio en los primeros días de la COVID. Fue realmente hermosa. Que Dios le dé descanso”, escribió Vance en X.
“Nos unimos en oración con los católicos de todo el mundo por el descanso eterno del alma del pontífice y por este período de transición para la Iglesia Católica. Que descanse en paz”, reza a su vez el texto en X del secretario de Estado Marco Rubio, mientras que la Fiscal General, Pam Bondi, ofreció en esa red social sus “profundas condolencias y oraciones a los católicos de todo el mundo por la muerte del papa Francisco, que dedicó su vida a Dios y a la Iglesia”.