Quedó inaugurada la muestra “Maraña” de la artista Maria Marta Kleine, en la sala de Artes Visuales del Complejo Cultural Cipolletti. Con un gran marco de público presente la reconocida artista presentó sus obras, acompañada por una performance a cargo de María Eugenia Leas, Marianela Tisberger Zuain y Miriam Viviana Frascaroli.
“Maraña” y Maria Marta Kleine abren una puerta a un tiempo más amable, donde el encuentro es posible, para completar ese círculo virtuoso que une al artista con el público.
La exhibición «completa» se podrá ver hasta el 17 de diciembre de miércoles a domingos de 16:30 a 21:30 hs. . Y luego quedará hasta finales de enero una versión con menos elementos, según se informó desde la Secretaría de Cultura.
Acompañaron a la artista, el secretario de Cultura Jorge Onofri, directores y referentes de la secretaría municipal.
María Marta destacó que es un día muy feliz y alegre, “Contemplo la pequeñez, la inmensidad, la delicadez, agradecida de saber confiar en las personas que colaboraron con la exhibición”. “Es una historia que no es lineal, hay un cúmulo de experiencias de miles de situaciones, es mi historia de vida volcada de otro modo”, agregó.
Maria Marta Kleine inicia en 2020 un proceso de análisis,revisión y activación de su cuerpo de obra acompañada por Sofia Torres Kosiba. En el transcurso de estos encuentros virtuales y ante la enorme y vibrante producción, crece la idea de llevar ese universo a una sala de exposiciones para dar curso a esta práctica casi ritual del obrar de los artistas que es compartir y abrirse al público.
Descartando otras posibilidades, ella inicia un movimiento amoroso y enérgico en su territorio. El deseo de hacer raíz y situar su exposición en Cipolletti y más específicamente en el Complejo Cultural que lleva el nombre de la ciudad.
Kleine habilita algo más que lo meramente expositivo. Desde una enorme generosidad, ella amplía la propuesta convocando a otras y otros artistas, integrando disciplinas, trabajando codo a codo con el equipo del Complejo Cultural, gestionando recursos y convirtiendo la exposición en una entidad viva y nutritiva para su comunidad.
Su larga trayectoria docente le da la soltura para activar talleres libres para infancias, adolescencias y público en general, laboratorios, performances multidisciplinares, conversatorios y su presencia habitando y haciendo del espacio un hogar multicolor.
Paisajes, personajes, multiplicidad de formas, pinturas, esculturas, instalaciones, video, performances componen el entorno de este “hogar” que abrirá sus puertas aquí, en noviembre.
Consideramos de vital importancia esta calidad de propuestas en esta instancia de recuperación de los encuentros presenciales y de la reactivación de la escena cultural de la región. Y celebramos poder asistir y acompañar a artistas como Maria Marta que brindan mucho más que su obra.
Arte y vida, redes afectivas y compromiso como camino para construir una comunidad del arte patagónico saludable y diversa.
Sobre la Obra MARAÑA. Desplegar Abismar Flotar
Acercarse hasta el borde y mirar atentamente cada detalle de los lugares velados, reconocerlos, integrarlos.
¿Hay miedo? Sí. No lo negamos. Lo abrazamos y le decimos que hay lugar, lo acomodamos junto a la gracia, los colores, la incerteza, el espacio y algunos personajes.
Estos nuevos paisajes parecen girar y detenerse. El movimiento es cíclico, continuo. Desplegarlo todo para recorrerlo y acercarse de nuevo al borde.
Abismar podría ser un verbo inventado por M. M.
Es su modo de andar y de presentar lo que fluye de sí hacia el afuera.
María la araña
organiza y edita,
maderas, papeles, pigmentos
arandelas, metales, retazos.
María maraña
presenta y construye desde lo perdido, lo que ya no existe y
desde algo mínimo un mundo imposible.
María la araña juega y elabora un tejido extraño, de sombras, dolores, gracias luminosas, ternuras y dones.